Artur Mas se querellará contra quienes «maquinaron» la operación Cataluña y el espionaje

Artur Mas se querellará contra quienes maquinaron la operación Cataluña y el espionaje

06 de mayo 2025/Agencias
El expresidente de la Generalitat de Cataluña Artur Mas ha anunciado este lunes que presentará una querella criminal contra las personas que «maquinaron» la llamada operación Cataluña y contra quienes durante cinco años le espiaron ilegalmente sin autorización judicial.

Así lo ha indicado Mas en su intervención inicial, en catalán, en la comisión de investigación del Congreso sobre la operación Cataluña, que tuvo como objetivo, según ha recordado, «destruir, por las vías que fueran necesarias, legales o no», el proceso independentista.

«No se trataba de eliminar terroristas, sino soberanistas; de eliminarnos políticamente, civilmente, llevarnos hasta la muerte civil», ha enfatizado Mas en una larga intervención que ha concluido con la denuncia a ese espionaje «permanente y sistemático» que sufrió durante un lustro, según ha recalcado.

Mas, primer dirigente catalán presunta víctima de esa operación que comparece en la comisión, se ha reivindicado como la persona que recibió «un castigo más duro desde este punto de vista de espionaje ilegal», porque, de hecho, ni siquiera figuraba en la lista de 18 personas que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) tenía avalada para hacerles un seguimiento.

Ha sido este lunes cuando ha salido a la luz un informe pericial de Citizen Lab, una entidad vinculada a la Universidad de Toromto (Canadá), que desvela que el teléfono móvil de Mas fue espiado una treintena de ocasiones entre los años 2015 y 2020 con el ‘software’ Pegasus, la primera vez de ellas el 7 de julio de 2015.

Tras ese informe y después de todo lo que ha conocido sobre la supuesta trama policial creada durante el Gobierno de Mariano Rajpy, el expresidente catalán ha optado por presentar una querella criminal contra «aquellas personas que en esos años causaron un mal tan grande al sistema democrático».

Ya a preguntas de diputado de EH Bildu Jon Iñarritu, Mas no ha podido concretar cómo va a articular esas querellas y ha dicho que lo hará con la técnica jurídica que sus abogados le sugieran como mejor camino, como podría ser acumularlas o fusionarlas.

Han sido -ha lamentado- quinientos megas de una «violación» de su intimidad. «Me robaron la intimidad», ha reiterado antes de celebrar que el Congreso esté celebrando esta comisión, aunque como «demócrata» le hubiera gustado que no hubiera tenido que existir.

Una operación para «destruir ideas, personas y liderazgos»
Mas ha querido iniciar su intervención con el relato de todo lo que aconteció desde finales de 2012, cuando Rajoy llegó a la Moncloa, y ha aseverado que «desde las entrañas» del Estado se organizó una operación «ilegítima e inmoral para destruir proyectos políticos, ideas, personas y liderazgos».

Ha dejado claro que su intención este lunes era exponer la verdad, sin ánimo alguno de venganza ni de ir contra nadie, porque, en su opinión, «la única manera de compensar los males acontecidos a la democracia española es saber lo que hicieron determinados estamentos del Estado: es saber la verdad».

También ha citado entre los objetivos de su comparecencia contribuir a que los que tomaron determinadas decisiones contra el independentismo asuman su responsabilidad porque actuaron «al margen de la legalidad».

En ese repaso a esa etapa, ha explicado que optó por adelantar las elecciones y por consultar al pueblo de Cataluña si estaba a favor del «concepto del derecho a decidir», ya que en ese momento «no se hablaba de independencia», sino de recabar la opinión de los ciudadanos.

Quien instrumentó la operación Cataluña fue el gobierno del PP, ha enfatizado Mas. Y lo hizo -ha agregado- en «connivencia» con la Policía Nacional, «un cuerpo armado», el CNI y determinados fiscales, jueces y periodistas que «se prestaron a este juego».

«¿Como se hizo? Fabricando informes falsos, pagados además con dinero publico. Y todo para fabricar mentiras», se ha preguntado y respondido el exdirigente catalán.

Para Mas, las víctimas de esa operación no fueron él, ni Jordi Pujol, ni Xavier Trías, ni el entonces presidente del Barcelona C.F., ni «tantas ni tantas personas». «La víctima fue el ciudadano de Cataluña, que vio como se manipulaba todo lo necesario para alterar su voto, la piedra angular de la democracia», ha apostillado.

Según Más, todo lo que él cree pasó para perseguir al independentismo «no son opiniones o estados de ánimo», sino hechos que, ademas, están anotados y grabados.

Porque no fue solo el excomisario José Manuel Villarejo quien aparece en las conversaciones que este grabó, sino que «en cada grabación siempre había alguien más, personas que tenían un grandísimo poder», como el entonces número dos del Ministerio del Interior o la secretaria general del PP.

Conversaciones para «dinamitar los fundamentos de la democracia», en las que hablaban de una operación montada en todo regla para cargarse proyectos políticos e ideas» y para que el proyecto que el propio Mas lideraba perdiera las elecciones, ha subrayado.

«No puedo cambiar lo que pasó ni me inspira ningún ánimo vengativo. Fui víctima y he salido lesionado a todas luces», ha manifestado Mas, antes de afirmar que su pretensión es «ayudar a construir un presente y un futuro mejores».