Islas Verdes: avances claros, desafíos urgentes

130325 Casimiro Curbelo

Casimiro Curbelo

Los datos que recoge el reciente Informe de Coyuntura Económica de La Gomera confirman una realidad que quienes vivimos y trabajamos aquí ya percibíamos: las Islas Verdes están avanzando. La Gomera cerró el año 2024 con indicadores muy positivos: aumento del número de empresas, mejora en la afiliación a la Seguridad Social y reducción del desempleo a los niveles más bajos de los últimos años. A esto se suma un repunte en la confianza empresarial y un notable dinamismo en sectores como la hostelería, que debemos seguir impulsando.

Sin embargo, estos logros no deben llevarnos a la complacencia. El camino hacia un crecimiento económico sólido y sostenible en nuestras islas —La Gomera, El Hierro y La Palma— aún tiene importantes desafíos por delante.

Uno de los principales retos es el marco fiscal. No son suficientes las medidas implantadas para el combustible o los billetes para residentes. También hay que abordar una política fiscal diferenciada que impacte directamente en el IRPF y en los impuestos que afectan a nuestras empresas. Estas medidas no son privilegios, sino herramientas imprescindibles para garantizar la cohesión y la justicia territorial, porque los sobrecostes derivados de la doble insularidad limitan la competitividad de nuestras empresas y encarecen el día a día de nuestras familias.

Junto a esto, debemos poner en marcha una estrategia de empleo adaptada a las personas mayores de 55 años, que incluya formación específica y un acompañamiento adecuado para facilitar su reinserción laboral. Del mismo modo, es preciso implementar medidas específicas para la empleabilidad juvenil de la mano de programas duales de formación y empleo como los que ya están en marcha en islas como La Gomera.

Todo ello, nos motiva a defender una acción política valiente y diferenciada. Debemos mejorar la conectividad insular con infraestructuras modernas y eficientes, impulsar políticas de vivienda asequible, garantizar el acceso a servicios públicos de calidad y apostar decididamente por la digitalización, clave para fijar población y abrir nuevas oportunidades.

Las Islas Verdes han demostrado que, con voluntad política, es posible avanzar. Pero para que ese progreso se traduzca en un bienestar real y duradero, necesitamos el compromiso firme de todas las instituciones. No pedimos privilegios, sino equidad. Y estamos preparados, como siempre lo hemos estado, para trabajar con lealtad institucional y con una visión de futuro que garantice un desarrollo justo, sostenible y a la altura de nuestra gente.

Porque si no logramos transformar los buenos datos en oportunidades reales para la ciudadanía, estaremos perdiendo una oportunidad histórica. Es hora de actuar.