Servicios Sociales y Gobierno de Canarias adoptan medidas urgentes para mejorar la convivencia entre los centros de acogida y los vecinos
18 de julio 2025
Alejandro Marichal: “El malestar de los vecinos no puede seguir ignorándose. Es hora de actuar con firmeza y coordinación desde todas las Administraciones.”
Francis Candil: “El compromiso es incluir a los centros del municipio en el programa Canarias Convive para posibilitar su inserción social, educativa y profesional, trabajando de la mano con la comunidad”.
Ruyman Cardoso: “Hemos pedido al Gobierno soluciones claras: más control en los centros, diálogo directo con los vecinos y apoyo real a los menores para que se integren y convivan con respeto.”
La creciente tensión vecinal en el núcleo de Fataga ante los conflictos derivados de la presencia de menores migrantes no acompañados ha motivado la intervención directa de la Concejalía de Servicios Sociales y Participación Ciudadana del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y la Viceconsejería de Bienestar Social del Gobierno de Canarias para adoptar de medidas urgentes. Tal y como ha explicado el primer teniente de alcalde, Alejandro Marichal, “tras una reunión celebrada recientemente entre representantes municipales y vecinos del pueblo, se constató una situación de malestar generalizado. Este malestar no puede seguir ignorándose. Es hora de actuar con firmeza y coordinación desde todas las Administraciones”.
Durante un encuentro celebrado en el mes de junio convocada por la Asociación de Vecinos de Fataga, los residentes expusieron los representantes municipales los numerosos incidentes ocurridos en los últimos meses, así como la preocupación por la falta de control en la entrada y salida de los menores del centro. Esta situación motivó la reunión institucional entre el primer teniente de alcalde de San Bartolomé de Tirajana, Alejandro Marichal; el concejal de Participación Ciudadana, Ruyman Cardoso; representantes de la Asociación Cultural Casa Canario-Marroquí; y el viceconsejero de Bienestar Social del Gobierno de Canarias, Francis Candil. Durante el encuentro, explica Cardoso, “se exigió al Ejecutivo autonómico la puesta en marcha de medidas concretas que garanticen una convivencia pacífica y segura entre la ciudadanía y los menores migrantes acogidos. Hemos pedido al Gobierno soluciones claras: más control en los centros, diálogo directo con los vecinos y apoyo real a los menores para que se integren y convivan con respeto”.
En la reunión se trasladaron las propuestas elaboradas a partir de la interlocución directa con los vecinos. Entre ellas destacan el refuerzo del control y acompañamiento por parte del equipo gestor del centro (DEMENA SAMU), la creación de una Mesa de Convivencia y Diálogo con participación vecinal, institucional y de los propios menores, así como la puesta en marcha de actividades comunitarias que promuevan la integración y el compromiso social de estos jóvenes.
La Asociación Casa Canario-Marroquí ofreció su colaboración como entidad mediadora entre las administraciones, los menores y la ciudadanía. De esta manera, además de facilitar la integración a través de formación sociolaboral, se comprometen a ayudar a los jóvenes que deseen continuar su proceso migratorio fuera de la isla, gestionando los trámites necesarios para su traslado.
El viceconsejero Francis Candil acogió positivamente las propuestas y confirmó que los centros existentes en el municipio serán incluidos en el desarrollo del programa Canarias Convive, una iniciativa del Gobierno de Canarias en colaboración con la Universidad de La Laguna que promueve la integración, la mediación intercultural y la convivencia vecinal a través de la educación, la inserción laboral y la participación ciudadana.
“El objetivo es que estos jóvenes reciban un acompañamiento integral que facilite su inserción social, educativa y profesional, trabajando de la mano con la comunidad”, declaró Candil. Asimismo, subrayó que “el acceso al empleo es la vía más directa para la inserción de los colectivos vulnerables” y se comprometió a activar las herramientas necesarias para que “la convivencia en el municipio se restablezca en un clima de respeto y corresponsabilidad”.
Las partes acordaron dar seguimiento a los compromisos asumidos con una próxima reunión de evaluación, con el objetivo de garantizar que las soluciones se materialicen en acciones concretas y sostenibles.