LA ULL IMPULSA LA INNOVACIÓN EN NANOTECNOLOGÍA APLICADA A LA EDIFICACIÓN SOSTENIBLE
La aplicación de determinados nanomateriales en edificaciones puede generar un efecto autolimpiante de superficies que elimina restos de suciedad y contaminación ambiental, lo cual también contribuye a mejorar la calidad de aire al evitar acumulación de contaminantes. Los investigadores de la Universidad de La Laguna Pedro Esparza, del Departamento de Química, y Jorge Méndez, de Física, investigan la fotocatálisis, que es el proceso físico-químico tras estas aplicaciones, y recientemente han empezado a colaborar con Fotocan, comercializadora de productos con esta tecnología. Para reforzar este trabajo conjunto, la universidad y la empresa han firmado un protocolo general de actuación de dos años de duración prorrogables.
El profesor Méndez y Pedro del Real, de Fotocan, se han reunido hoy, jueves 17 de julio, con el rector de la Universidad de La Laguna, Francisco García, y el vicerrector de Investigación y Transferencia, Antonio Aparicio, para explicarles los detalles de esta colaboración que ya cuenta con el respaldo de la Federación Provincial de Entidades de la Construcción de Santa Cruz de Tenerife (FEPECO).
El profesor de la Universidad de La Laguna explicó que en su equipo llevan más de una década investigando en fotocatálisis para diversas aplicaciones, como la creación de una fotosíntesis artificial con aplicaciones en campo de la energía, o una “tinta de seguridad” que solo es visible al aplicarse un láser sobre ella y que próximamente comenzará a ser explotada comercialmente a través de una empresa spin-off de la Universidad de La laguna que está en proceso de formación.
Por su parte, Del Real relató que su empresa comercializa un recubrimiento líquido basado en óxido de titanio, material que favorece las propiedades autolimpiantes al absorber la radiación ultravioleta, y cuya aplicación puede ser de gran interés en grandes infraestructuras públicas. La investigación y desarrollo de este producto surgió una línea similar a la de los profesores Esparza y Méndez, de ahí que, al conocerse ambas partes en un congreso de investigación, decidieran unir esfuerzos.
En virtud al protocolo firmado, el equipo universitario podrá realizar un monitoreo y testeo del producto desarrollado por la empresa para certificar su validez. Además, añadiéndole la tinta de seguridad mencionada, se podrá asegurar que al edificio o infraestructura se le ha aplicado realmente el tratamiento de Fotocan, y no de otra empresa. En estos momentos van a iniciarse contactos con entidades públicas y privadas para presentarles el producto con vistas a su posible adquisición y aplicación.
Tanto el rector como el vicerrector valoraron que esta colaboración es un ejemplo modélico de transferencia de investigación y colaboración pública-privada, para introducir un producto que mejorará la sostenibilidad de las edificaciones y, por tanto, entronca con varios de los objetivos de la Agenda 2030.