Desalojan una población por los incendios en Australia y mantienen evacuadas otras 26

24 de febrero 2024/Agencias
Las autoridades del estado de Victoria, en el sureste de Australia, emitieron este sábado una orden de desalojo para una localidad y pidieron a los vecinos de otras 26 que no regresen a sus casas debido a los incendios forestales que azotan la región en los últimos días.

El aviso de emergencia más apremiante es el emitido para la localidad de Amphitheatre, una población rural de 223 habitantes a quienes el organismo Victoria Emergency pidió que se vayan «inmediatamente», «antes de que las condiciones sean demasiado peligrosas».

«Puede que los servicios de emergencia no sean capaces de ayudarles si deciden quedarse», reza el mensaje emitido por Victoria Emergency.

Además de esta advertencia, el organismo emitió dos avisos de un nivel inferior para cientos de personas que residen en 26 localidades de la zona que fueron evacuadas en los últimos días.

El organismos aconseja a aquellos que ya dejaron sus casas que no regresen por el momento y a los que no se hayan ido que no se muevan, eviten los riesgos relacionados con el fuego y comprueben que tienen suficiente agua y víveres.

Un millar de bomberos ayudados por más de 50 aeroplanos luchan contra el fuego en la última semana en el estado de Victoria, que sufre las altas temperaturas y la falta de precipitaciones del verano austral.

Aunque han conseguido controlar algunos de los focos, el Instituto de Meteorología ha advertido de que el calor previsto la semana que viene aumenta el riesgo de incendios en los próximo días, especialmente a partir del miércoles.

La temporada de incendios en Australia, uno de los países más vulnerables a la crisis climática, varía según la zona y las condiciones meteorológicas, aunque generalmente se registran en el verano austral, entre los meses de diciembre y marzo.

Entre 2019 y 2020, durante el bautizado como ‘Verano Negro’, al menos 33 personas perdieron la vida por los incendios que asolaron gran parte de Victoria y Nueva Gales del Sur que afectó a unos 3.000 millones de animales, calcinó unas 3.000 viviendas y quemó unas 180.000 kilómetros cuadrados de terreno.