Drago Canarias alerta sobre la turistificación de las Fiestas de Mayo de Los Realejos, en Tenerife
28 de mayo 2025
Existe cierto consenso entre los vecinos y vecinas del municipio acerca de la pérdida de identidad de las Fiestas de Mayo por culpa de su promoción como reclamo turístico.
Carmen Peña, portavoz de Drago Tenerife: “se corre el riesgo de vaciar de contenido la fiesta y de convertir al municipio y a los realejeros y realejeras en un decorado de su propia historia”.
Drago Canarias en Los Realejos, Tenerife, alerta de una transformación progresiva de las Fiestas de Mayo —las fiestas tradicionales del municipio—, con fechas señaladas como el Día de la Cruz, celebrado el pasado 3 de mayo, o la Romería, el domingo 25.
Tal y como sostiene buena parte de los vecinos y vecinas de Los Realejos, lo que durante generaciones fue un espacio de encuentro, de trabajo comunitario y de identidad de pueblo empieza a verse desplazado por una puesta en escena cada vez más dirigida al escaparate turístico.
De hecho, el pasado mes de enero, parte del Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de los Realejos, del Partido Popular, estuvo presente en FITUR promocionando, precisamente, las Fiestas de Mayo como reclamo turístico.
Ante esta situación, la portavoz de Drago Tenerife, Carmen Peña, se plantea “qué papel juega realmente la comunidad en unas fiestas que se exhiben hacia fuera” y señala que “en un momento en el que Canarias entera cuestiona el modelo de turismo masivo y sus consecuencias sobre el territorio y la vida cotidiana, se hace más necesario que nunca reivindicar unas fiestas hechas por y para el pueblo”.
Por ello, Peña sostiene que “lo importante es recordar y proteger lo que hace verdaderamente especial a nuestras fiestas, que es la participación sincera del pueblo, el esfuerzo compartido y la emoción colectiva que nace desde dentro, y no desde intereses que buscan convertir tradición en espectáculo” y añade que “de seguir por esta vía se corre el riesgo de vaciar de contenido la fiesta y de convertir al municipio y a los realejeros y realejeras en un decorado de su propia historia”.
Asimismo, Peña entiende que “se valore y se comparta nuestra riqueza cultural”, pero recalca que “el crecimiento de esta exposición no puede darse a costa del sentido original de la celebración” y que “las Fiestas de Mayo deben seguir siendo una expresión viva de los vecinos y vecinas”.
