El Ejército pakistaní dice haber matado a 30 presuntos insurgentes que vincula con India

05 de julio 2025/Agencias
El Ejército de Pakistán mató entre el 1 y 3 de julio a treinta presuntos insurgentes en el norte del país, cerca de su frontera con Afganistán, pertenecientes a una organización que vincula con la India, informó en un comunicado.

El ala de medios del Ejército paquistaní (ISPR) informó de que las fuerzas de seguridad detectaron un movimiento de un «numeroso grupo de ‘khawarij’ (disidentes extremistas) que intentaron infiltrarse a través de la frontera entre Pakistán y Afganistán entre el 1 y el 3 de julio, en la conflictiva provincia paquistaní de Khyber Pakhtunkhwa.

Según Islamabad, los treinta supuestos insurgentes que fueron abatidos formaban parte del grupo ‘Fitna al Khwarij’, al que Pakistán acusa de recibir apoyo indio.

«Nuestras tropas respondieron con eficacia y lograron frustrar el intento de infiltración de estos ‘khawarij’ patrocinados por la India. Como resultado de una intervención precisa y profesional, los treinta insurgentes fueron abatidos. Asimismo, se recuperó una gran cantidad de armas, municiones y explosivos en poder de los elementos eliminados», detalló el ISPR.

El Ejército llamó al Gobierno de facto de Afganistán liderado por los talibanes a que «controle y evite el uso de su territorio por parte de «apoderados extranjeros`’ para llevar a cabo actividades terroristas contra Pakistán».

Khyber Pakhtunkhwa, en el noroeste de Pakistán y fronteriza con Afganistán, vive sumida en una oleada de violencia militante en los últimos años, especialmente en los distritos tribales y tras la llegada al poder de los talibanes en Kabul en agosto de 2021.

La tensión en la provincia, una de las más violentas de Pakistán junto a la meridional Baluchistán -fronteriza con Afganistán e Irán, y en la que operan grupos separatistas a los que Islamabad acusa de terrorismo- ha aumentado progresivamente desde la vuelta al poder de los talibanes en Afganistán en agosto de 2021.

La semana pasada, 13 soldados de Pakistán murieron en un atentado suicida contra un convoy militar, y el pasado miércoles, cinco pasajeros de un vehículo, entre ellos un funcionario gubernamental, murieron en un atentado con bomba. Ambos ataques ocurrieron en Khyber Paktunkhwa.

Pakistán ha vinculado en los últimos meses a varios grupos insurgentes con la India. Las dos potencias nucleares sudasiáticas vivieron su mayor conflicto en décadas los pasados abril y mayo tras un atentado contra civiles en la Cachemira administrada por la India del que Nueva Delhi acusa a Islamabad.